Las cargo bikes o bicicletas de carga son una alternativa al transporte de corto recorrido y una opción ideal para la movilidad urbana. Pueden ser de transporte ligero o de transporte de personas y en algunos países como Alemania, Países Bajos o Noruega son una apuesta segura para desplazarse, con un ahorro económico importante en costes de movilidad.

Con el auge del ciclismo urbano, este tipo de bicicletas se están empezando a imponer en algunos sectores, como el del transporte de pequeñas mercancías, el turístico o el del transporte personal y familiar. Pero esta no es una opción de movilidad nueva, ya que en las décadas de los años cincuenta y sesenta del siglo pasado las bicicletas de carga tuvieron su época de esplendor entre los pequeños negocios. La democratización de los vehículos a motor las hizo desaparecer casi en su totalidad, pero ahora, en una era en la que se trata de reducir al máximo las emisiones contaminantes, las cargo bikes vuelven a ser una opción real para el día a día.

La electrificación en el ciclismo también ha impulsado este segmento, haciendo viables recorridos más largos, mayores capacidades de carga y una adaptación a la vida real más eficiente. Ya sea como transporte de paquetería o como transporte familiar, entre otros, estas bicicletas se están consolidando poco a poco en nuestro día a día gracias a su ligereza y estabilidad.

El ahorro económico con esta opción es evidente, con una reducción de costes de gasolina, de parkings y zonas azules y de mantenimiento, además del consiguiente menor impacto ambiental.

¿Qué son las cargo bikes?

Existen multitud de modelos con diferente configuración. Generalmente, las bicicletas de carga han tenido una configuración de tres ruedas, con la carga en la parte anterior. Una plataforma o un gran cesto permite cargar pesos cercanos a los 200 kg –siempre según especificación del fabricante– o transportar hasta tres personas en su vertiente con asientos.

En los últimos tiempos, la proliferación de estos modelos, además de la ayuda eléctrica, ha favorecido la creación de otras configuraciones: bicicletas de dos ruedas de batalla alargada con carga delantera o trasera, que dan más versatilidad al vehículo en detrimento de la capacidad de carga.

¿Qué tipos existen?

La amplia oferta de este tipo de bicicletas ha creado multitud de modelos diferentes adaptados a cada necesidad: desde sencillas bicicletas reforzadas (de configuración normal y preparadas para una mayor capacidad de carga) hasta las cycle trucks (preparadas para carga anterior y con un diámetro de rueda delantera menor), pasando por las cargo (de tres ruedas y con caja de carga). Las opciones son casi infinitas. Por otro lado, las llamadas long tail (de cola larga y con carga trasera) y las long john (de morro largo y con carga delantera) son opciones de dos ruedas, con mucha versatilidad.

¿Cuál elegir?

La elección irá siempre en función de la necesidad, ya que es un segmento que ofrece una amplia variedad de modelos adaptados a cada uso. En el sector del transporte de carga, el modelo a escoger variará en función del volumen a transportar, en cuyo caso los modelos eléctricos de tres ruedas son siempre la opción más recomendable. En el transporte de paquetería suelen usarse estos tipos, mientras que en transportes más esporádicos se opta normalmente por bicicletas de tipo alargado de dos ruedas.

En cambio, para el transporte de personas –generalmente niños– existen modelos con dos asientos delanteros en paralelo, una opción ideal para pequeños desplazamientos cotidianos. Por su configuración, podremos tener a nuestros hijos controlados en todo momento, evitándonos sustos y percances.